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Actualizado 27.06.2021

Llevamos años demandando el uso dotacional público (con servicios básicos para el distrito) de los antiguos terrenos de ADIF en Delicias. Ahora vemos como estos van a ser utilizados, al menos durante los próximos dos años, para la construcción de un macrocentro de ocio con 1.600 plazas que traerá masificación, problemas de movilidad, de seguridad y de ruido a la zona. 

Un distrito carente de equipamientos públicos

Arganzuela tiene una importante carencia de servicios básicos. Así lo han reconocido reiteradamente todos los partidos políticos. Faltan centros educativos, centros de salud, centros de día, polideportivos, bibliotecas y un largo etc. Esto se debe a que las miles viviendas que se construyeron en zonas del distrito como Delicias, a partir de la recalificación de esta antigua zona industrial y de la operación Pasillo Verde, no fueron acompañadas de la construcción de las necesarias dotaciones.

El Plan General de Ordenación Urbana (PGOUM) vigente, de 1997, tiene reservados unos terrenos para la construcción de estas dotaciones. Se trata de los terrenos situados detrás del Museo del Ferrocarril, junto a la calle Párroco Eusebio Cuenca, que están incluidos en el API 02.14 “Pasillo Verde Ferroviario” (dos parcelas, una de 36.499,68 m2 destinado a Equipamiento Público Básico para el distrito y la otra de 34.481,38 m2 destinada a Equipamiento Público Singular para la ciudad). Pese a ello, ADIF ha estado reteniéndo indebidamente ambas parcelas durante 30 años, manteniéndolas  en situación de abandono.

Desde hace ya mucho tiempo, asociaciones y colectivos vecinales, AMPAS y otras entidades del distrito exigimos que en ellas se creen, por fin, las dotaciones comprometidas. No en vano estos terrenos son el último reducto que queda para solventar las grandes carencias que tiene un distrito con una infradotación de equipamientos.

El Protocolo de 2018

Consecuencia de este anhelo, en octubre de 2018 ADIF, el Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio de Cultura firmaron un Protocolo General de Actuación con el fin de ceder por fin los terrenos para dotaciones públicas. En él se recogía el compromiso de que una Comisión de Seguimiento elaboraría un Plan Director, que mediante un proceso participativo,  con el fin de recuperar uno de los terrenos para las vecinas y vecinos de Arganzuela y el otro para los de todos Madrid. Y para ello se daban un plazo de cuatro años–octubre de 2022–.

La idea era la creación de dotaciones para el distrito y la construcción de la nueva sede de la Escuela de Danza, dependiente del INAEM/Ministerio de Cultura

La jugada de Adif

A los pocos meses de esta firma, ADIF –retorciendo la normativa y dando la espalda al protocolo firmado– decidió unilateralmente especular con esta zona, arrendando el espacio a las empresas Teatro Bankia Príncipe Pío y Letsgo para que levanten un enorme complejo de ocio. Este iba a constar de varias carpas con un aforo de 6.000 localidades más un espacio de restauración al aire libre (“Beer Garden”).

En octubre de 2019 varias entidades nos unimos con el fin de solicitar la inmediata paralización de los trabajos, alertados por las noticias publicadas en los medios de comunicación y ante el avance de las obras de construcción del llamado “Espacio Delicias” y la constatación de que las empresas que lo impulsaban estaban vendiendo entradas de sus espectáculos anunciados para diciembre con los permisos de actividad preceptivos aún en trámite, ya que el Ayuntamiento no había concedido las licencias de actividad ante las numerosas deficiencias del proyecto

La paralización de las obras

Mediante la movilización vecinal y tras varias reuniones con ADIF y con las áreas de Urbanismo y de Licencias del Ayuntamiento de Madrid para recabar información, se paralizaron las obras. Además, la Concejal-Presidenta de la Junta Municipal de Arganzuela se comprometió en una reunión informativa el 20 de noviembre de 2019 a tener elaborado un plan en el plazo de dos meses. 

Se retoma la ocupación… y la lucha por lo que es nuestro

Llegó la pandemia. Tras dos años de paralización de las obras, en mayo de 2021 se retoma la ocupación de los terrenos y se anuncia de nuevo el complejo de ocio cambiando la entidad financiadora, que ahora es Ibercaja. Las obras se desarrollan con enorme rapidez y opacidad.

Retomando las reivindicaciones plantedas en 2019, manifestamos que la cesión en regimen de alquiler nos preocupa enormemente porque:

– Se infringe el uso previsto en la calificación del suelo: es falso que en el espacio se vaya a alojar una actividad cultural. Se trata de ocio y negocio.

– Responde solo a los intereses especulativos de ADIF.

– Se aplaza otra vez la creación de los necesarios servicios públicos, dejando en papel mojado el protocolo que ADIF firmó con el Ayuntamiento en octubre de 2018. Más aún cuando solo ha tenido lugar una reunión de la Comisión de Seguimiento y cuando el protocolo tiene una fecha de caducidad muy próxima, octubre del 2022.
– Aún siendo una instalación temporal y aunque las graves deficiencias iniciales hayan podido ser subsanadas o reducidas, perjudica a los vecinos y vecinas de la zona por su elevado impacto ambiental, que sin duda se traducirá en problemas de masificación, seguridad, movilidad, ruidos, etc. Ya hemos vivido varios grandes incendios y serios problemas de acceso de los servicios de emergencia a esta zona cuando se convirtió en un asentamiento ilegal.
Por ello, instamos al Ayuntamiento de Madrid y a todas las autoridades competentes en este ámbito a:
– Velar por los intereses de la ciudadanía y paralizar las obras, teniendo en consideración la irregularidad que supone situar en esos terrenos actividades de ocio, atendiendo a la calificación de estas parcelas. 
– Acelerar el planeamiento de los usos dotacionales previstos en el PGOUM y demandados por los vecinos y vecinas, defendiendo el interés público
– Retomar de forma inmediata las reuniones de la Comisión de Seguimiento establecida en el protocolo de 2018,  con el compromiso de que el Plan Director esté elaborado en febrero de 2022 como muy tarde.

– Planificar, mientras tanto, con participación vecinal, usos temporales que respondan al interés público y al carácter de los terrenos.
La magnitud de las carencias de servicios públicos en Arganzuela es tal que muchas asociaciones y colectivos del distrito y de zonas próximas nos hemos unido en esta causa para sensibilizar a la ciudadanía y denunciar esta situación extremadamente grave. Nos mantenemos activos en la defensa del carácter dotacional y público de los terrenos y contra el tipo de la explotación que se está desarrollando.

Por último, anunciamos que estaremos atentos al periodo de información pública del proyecto para presentar, también por esa vía, nuestro parecer sobre todos los aspectos que nos preocupan.